La ciudad de SALTA será sede de un encuentro en el que se
reflexionará sobre las potencialidades de la región y los beneficios asociados
a este tipo de energía no convencional.
Investigadores de diversas entidades se reunirán el 17 de
abril en la ciudad de Salta para hablar sobre las potencialidades que posee la
región para desarrollar las energías renovables y los beneficios
socioeconómicos y ambientales de su utilización.
Biomasa, bioetanol, energía solar y su apropiación social
serán algunos de los temas que se presentarán durante el encuentro que
comenzará a las 14 hs en la sede del Consejo Profesional de Agrimensores,
Ingenieros y Profesiones Afines (COPAIPA) y es organizado por la Facultad de
Ciencias Naturales de la Universidad Nacional de Salta (UNSa), el INENCO y el
INTA.
La energía renovable es aquella que se obtiene de fuentes
consideradas “inagotables”, tanto por su cantidad de energía como por su
capacidad de regenerarse de manera natural. Por ejemplo, la energía solar absorbida por la Tierra en
un año es equivalente a 20 veces la energía almacenada en todas las reservas de
combustibles fósiles en el mundo. Es un tipo de energía gratuita, limpia y casi
inagotable.
Durante la jornada, el director del INENCO, Miguel
Condorí, se referirá a las aplicaciones de este tipo de energía en el NOA. “Se
presentarán algunos de las desarrollos y transferencias relacionadas con aplicaciones de energía solar, particularmente dentro del sector agroindustrial
y rural disperso”, comentó.
Por su parte, Silvina Manrique, quien también se
desempeña en el INENCO, se referirá el riesgo de que las reservas de la matriz
energética actual, que es predominantemente fósil-dependiente, disminuyan
paulatinamente en función de la demanda de energía. “En consecuencia, se
necesitaría utilizar más eficientemente las reservas actuales y considerar
nuevas fuentes en el diseño de la política energética actual”, sostuvo la
investigadora.
En este caso, la biomasa (compuesta por materiales
orgánicos no fosilizados) puede ser una fuente de energía alternativa,
renovable y disponible localmente a bajo costo y, además, contribuir a la
mitigación de los Gases de Efecto Invernadero (GEI).
A su vez, la producción de bioetanol a partir de la caña
de azúcar podría convertirse en una opción productiva interesante para este
país, para lo cual el INTA, a través de sus proyectos nacionales, inició
diversas líneas de acción.
Según el coordinador del Programa Nacional de Cultivos
Industriales, Alejandro Valeiro, “la óptica adoptada en estos trabajos no es
conservacionista, sino de promoción del desarrollo sustentable”.
La finalidad de las investigaciones que se llevan a cabo
en energías renovables es ser adoptada por los productores para el desarrollo
rural. Para ello, el coordinador del proyecto “Eficiencia
energética y energías renovables apropiadas para la agricultura familiar y el
desarrollo rural” del INTA, Francisco Cardozo explicará la manera por la
cual esa institución combina metodologías de enseñanza y aprendizaje para
generar, junto con los productores, conocimientos, habilidades y confianza en
la toma de decisiones que se ajusten a las condiciones agroecológicas,
socioeconómicas y culturales de la región.
Así, se referirá a los desarrollos tecnológicos
apropiados en refrigeración solar, calefacción y secado solar, bombeo de agua,
aerogeneradores, biodigestores, y cocinas y hornos a leña en diferentes
territorios.
Les dejo aquí el Programa de las Jornadas.